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Descubriendo la villa medieval de Aínsa (Aínsa - Huesca)

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El tiempo acaricia con sus largos dedos de sabio protector de las piedras de un país de leyenda, que hunde sus raíces en tiempos remotos. Los primeros pobladores habitaron los abrigos y covachas de este entorno prodigioso, y con el paso del tiempo fueron dando forma humana a uno de los enclaves más hermosos del Pirineo. Piedra sobre piedra, camino a camino, nombre a nombre..... las diferentes culturas que habitaron estas tierras dejaron huella singular.
CALLEJEANDO POR AÍNSA

DESCUBRIENDO LA VILLA MEDIEVAL DE AÍNSA
PUEBLO A LOS PIES DEL PIRINEO ARAGONÉS
HUESCA


El tiempo acaricia con sus largos dedos de sabio protector de las piedras de un país de leyenda, que hunde sus raíces en tiempos remotos. Los primeros pobladores habitaron los abrigos y covachas de este entorno prodigioso, y con el paso del tiempo fueron dando forma humana a uno de los enclaves más hermosos del Pirineo. Piedra sobre piedra, camino a camino, nombre a nombre..... las diferentes culturas que habitaron estas tierras dejaron huella singular.
Celtas, romanos, musulmanes, cristianos.... una historia de diversidad y riqueza que convierte la visita a la villa de Aínsa en un asombroso viaje en el tiempo, lleno de color y sembrado de maravillosas sorpresas.
Paseando por las viejas calles de la villa, declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1965, disfrutaremos del calor de sus gentes y de la belleza de un entorno con claro sabor medieval.
Aínsa, acogedora siempre, ofrece al visitante una amplísima oferta cultural y de ocio. Su enclave privilegiado le convierte en un punto de partida para realizar excursiones a pie o en bicicleta, para montañeros y esquiadores, para cazadores y pescadores que encuentran aquí uno de los rincones vírgenes que quedan en la actualidad, para amantes del arte y de la historia.

COMO LLEGAR


Desde lejos aparece como un apiñado caserío uniforme, proporcionado y armónico, destacando la esbelta torre de la iglesia, el enorme recinto del castillo y una de las plazas más bonitas de España. Dentro de las murallas la maravilla del románico en cada rincón, sorpresas constantes en cada detalle. Las calles, placetas, plaza e iglesia merecen una visita por sí solos.


DONDE COMER Y DORMIR

Brasería Alberto. Foto propiedad y extraída de Mágicos Pirineos

La gastronomía de Aínsa es un reflejo de la privilegiada ubicación del Sobrarbe, plagado de contrastes. Su cocina fusiona la tradición del puchero de alta montaña aragonesa, con la creatividad y una apuesta por el consumo sostenible y de proximidad. Es en definitiva una gastronomía unida a aus raices.

En cuanto al alojamiento tenemos que comentar que hay una buena relación calidad-precio para que se pueda disfrutar al máximo de unos días de relax. La comarca dispone de hoteles, casas rurales, alojamientos baratos, campings y apartahoteles baratos.


Nosotros elegimos para pasar la noche el parking municipal de Aínsa, situado en la parte alta del pueblo. Un sitio muy tranquilo (menos en verano), donde podemos estar super relajados. El lugar no es gratis, tendremos que pagar por estacionar, pero es muy barato: 0,30 céntimos la hora de estacionamiento, pero si se llega a partir de las 21:00 horas, es gratuito hasta las 8:00 de la mañana del día siguiente. Un lujo.



DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO
Plano del recorrido. Fuente: Panel informativo que se encuentra a la entrada del castillo
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS


OTROS DATOS DE INTERÉS

Dificultad: Muy fácil. Ideal para toda la familia
Sendero señalizado: No
Época recomendable: Todo el año
Fecha de la excursión: 12 de Abril  del 2019
Puntos de agua potable: Nos podemos encontrar muchas fuentes en todo el pueblo.
Sugerencias: Llevar en una mochila agua y comida energética. Utilizar ropa y calzado adecuados, dependiendo de la época elegida. Deja la basura en los contenedores. Respeta la fauna salvaje, el ganado, la vegetación y el patrimonio. Si vas en verano no te olvides de protección solar, (gorra, gafas y protección para la piel).
Cartografía: IGN Boltaa hoja 211-II E: 1:25.000
                       IGN Ansa hoja 211-IV E: 1:25.000
Enlaces de interés: Oficina Municipal de Turismo de Ainsa
                                   Parque Nacional Ordesa y Monte Perdido (Web oficial)
                                   Aínsa (Wikipedia)
                                   Aínsa a vista de dron 
                                   Mas información de la ruta en Wikiloc
                                   Descargate el track para GPS (archivo GPX)
                                   Descargate el recorrido para Google Earth (archivo KML)

Durante la Edad Media la villa fue un importante centro comercial y al estar situada en terreno fronterizo contaba con un gran número de construcciones fortificadas.
Para llegar a la parte alta del pueblo, donde se encuentra nuestro aparcamiento y la zona de pernocta, tenemos que coger la calle de Abajo, que se toma en una rotonda en la propia N-260. Esta carreterilla nos llevará directamente hasta la explanada junto al castillo, en la que se encuentra el aparcamiento.
Desde el aparcamiento llegamos a la pasarela que salva el foso del castillo y que conduce a su interior.


El castillo de Aínsa tiene un recinto bastante extenso, casi tan grande como el pueblo, y en el que se refugiaban sus habitantes ante las adversidades. La parte más antigua es la Torre del Homenaje; se trata de una torre pentagonal de reducidas dimensiones, construida en sillarejo sobre restos árabes en el siglo XI,  actualmente alberga el Centro de Interpretación de la la Fauna Pirenaica.

Torre del Homenaje, donde se encuentra el museo de la fauna pirenaica.
La otra torre más reciente fue construida a finales del siglo XVI y ahora alberga la oficina del Geoparque, donde podrás disfrutar de un viaje geológico con todo tipo de detalles. No te lo puedes perder, es gratuito y muy recomendable. Justo enfrente de esta torre está la Oficina de información Turistica, otra visita imperdible, ya que aquí de darán todo tipo de información acerca de qué ver, qué rutas de senderismo hacer, etc. donde te ayudaran a planificar tu estancia.




Tal vez lo más impresionante del castillo es poder recorrer sus murallas por la parte más alta. Desde aquí podrás descubrir por que era un punto estratégico de toda la zona. Las vistas son espectaculares y podrás descubrir, por una parte, todo el núcleo urbano desde una posición privilegiada y por otra la grandiosidad de las montañas del Pirineo Aragonés.



El patio de armas es impresionante, muy amplio y con muros reforzados por arquerías elevadas con arcos de medio punto, de evidente sabor románico a pesar de datar del siglo XVII y cuya función es la de sostener el Paseo o Camino de Ronda.
En el patio de armas del castillo tiene lugar durante la segunda quincena de julio el "Festival de Música Celta folk Castillo de Aínsa" y en septiembre la "Expo-feria de Sobrarve", entre otros eventos.
En el patio también podemos apreciar una nabata, que era la forma tradicional de transportar madera en Aragón a través de sus ríos.






Saldremos del castillo por la puerta oeste que da acceso a la Plaza Mayor, que hasta no hace muchos años estaba precedida por un foso, ahora cegado, que se salvaba mediante el correspondiente puente levadizo.


De esta forma entramos en el Casco Antiguo de Aínsa. Antiguamente Aínsa estuvo totalmente amurallada y para acceder a su interior había que entrar por uno de sus ocho puertas, de las cuales actualmente sólo se conservan seis. El casco antiguo, fue declarado conjunto histórico-artístico en 1964.
Lo primero que encontraremos tras pasar por la puerta Oeste del castillo será la espectacular Plaza Mayor, construida durante los siglos XII - XIII y una de las mas bellas de España. Se trata de una plaza rectangular de enormes dimensiones, que ha sido testigo de numerosos actos sociales y culturales a lo largo de toda su historia.



Lo que mas nos llama la atención de esta plaza son sus soportales de estilo románico, que se extienden a lo largo de toda la plaza, con arcos de medio punto y ojivales, todos distintos. En uno de los soportales todavía se puede ver la prensa de vino comunal que aún hoy en día se encuentra en uso y que utilizan por turnos los agricultores de Aínsa.


Prensa de vino comunal. Actualmente los agricultores de Aínsa la usan por turnos.
Bajo los arcos de la plaza nos encontraremos las tradicionales fondas y restaurantes en los que puedes degustar los platos típicos de la región, aunque eso si, son más caros que los de la parte inferior del pueblo.
En el centro de la plaza se encuentra el Ayuntamiento de Aínsa, un edificio de piedra de las mismas características arquitectónicas que el resto de casas de la villa.



La Plaza Mayor es el escenario donde cada Septiembre se celebra la "Fiesta de la Morisma" . Esta fiesta recuerda una leyenda según la cual una batalla de los cristianos contra los musulmanes por el domino de Aínsa, en un momento dado cuando parecía que los musulmanes saldrían victoriosos, los guerreros cristianos vieron sobre una carrasca una cruz en llamas, lo cual interpretaron como una señal de que dios estaba con ellos, por lo que arremetieron contra el enemigo hasta vencerlo. Aquella victoria sería el germen del Reino de Sobrarbe y por lo tanto origen también del Reino de Aragón. Por eso, hoy en el escudo de la Comunidad Autónoma de Aragón puede verse una carrasca con una cruz en su copa en uno de sus cuarteles.
De la Plaza Mayor salen sus dos únicas calles principales, son dos calles paralelas, largas y empedradas que se unen antes de llegar a una de las puertas del recinto amurallado.


Paseando por la calle Mayor se pueden observar varias fachadas de casas importantes de Aínsa, como la casa Arnal, la casa Bielsa, que tiene los miradores más bellos de toda la villa, o la Casa Fes. Por la abundancia de casas infanzonas a esta calle también se la conoce como Calle de los Nobles.
Las casas conservadas no son anteriores al siglo XVI, son casas blasonadas y en ellas destacan sus portadas que muestran el prestigio y poder de la casa, las ventanas ojivales, sus magníficas forjas, las balconadas, etc... Un lujo para la vista.


Un elemento muy característico de las casas de Aínsa son sus llamadores o trucadores, que tienen diferentes formas y significados, y son símbolos de una cultura ancestral.

Llamador o trucador de una casa de Aínsa. Foto propiedad y extraida de: A un clic de la Aventura
Al final de la calle Mayor nos encontraremos el Museo de Oficios y Artes tradicionales, que se encuentra en la que fue la Casa Latorre. Tras contemplar el espectáculo, nos asomamos a una de sus puertas más lejanas de la Plaza Mayor, "El Portal de Abajo".



Retrocedemos y ahora tomamos la calle Santa Cruz, que es la calle paralela a la calle Mayor y que va subiendo poco a poco hasta que nos encontramos de frente con la Iglesia de Santa María.
Esta iglesia románica data de finales del siglo XI y mitad del XII y como en la mayoría de iglesias del Sobrarbe tiene un aspecto de austeridad debido a la carencia de ornamentación.


Tiene una sola nave y un ábside semicircular, con una cripta subterránea bajo dicho ábside. En el interior de la cripta hay unos cuantos capiteles, que invitan a un pequeño juego. Tienes que descubrir cuales son los que están restaurados, y para ello en los que están arreglados hay grabada una "R", tienes que encontrarlos y comunicárnoslo.... Esperamos tus respuestas.





Adosado a la iglesia se encuentra el claustro con forma pentagonal, que tiene tres lados románicos y dos góticos. Un sitio que no te puedes perder, muy recomendable.


Lo más destacado de la iglesia es su torre del siglo XI, que domina toda la villa. Esta torre desempeñó un doble papel: religioso y militar, debido a su situación y a su considerable altura (30 metros), sus grandes dimensiones son únicas en todo el románico aragonés. Se puede subir a la torre a través de una escalera muy estrecha, y una vez arriba disfrutar de unas vistas extraordinarios ya que es el mejor mirador de todo el contorno.




Podrás ver las campanas de la torre de cerca y desde allí puedes subir al piso superior a través de una escalera bastante vertical y contemplar la bonita bóveda de ese piso con arcos entrecruzados, que parece ser que tuvo como modelo a la Catedral de Jaca.


En el exterior de la torre, y junto al lado sur del ábside se encuentra una habitación abovedada denominada el "cuarto del aceite", está encima de un amplio arco y parece ser que servía de comunicación con el desaparecido hospital que había en este lugar.


Desde las dos calles principales salen algunas callejuelas en las que te puedes perder para descubrir preciosos rincones o miradores desde los que contemplar el alucinante paisaje que tienes ante tus pies, así que no dudes en callejear como hicimos nosotros.


Aínsa en verano suele estar llena de gente, así que si quieres disfrutarla más tranquilamente una de las mejores épocas para visitarla es en otoño cuando todavía no hace frío.

Si tenemos más tiempo y queremos pasar una agradable jornada de excursiones por la zona, te aconsejamos que realices las siguientes visitas, no te defraudarán:



Ivana Excursiones al completo

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