Ruta del Agua y Acueducto Romano de Peña Cortada (Chelva-Calles Valencia)

Sobre los términos de Tuéjar, Chelva, Calles y Domeño se encuentran los restos de una colosal obra romana, el acueducto romano de Peña Cortada. Éste fue trazado con distintos sistemas de conducción de aguas que, desde su origen en el río Chelva, salvan grandes escollos topográficos. La longitud de los restos hallados es de 28,6 kilómetros, siendo su entidad comparable con los acueductos romanos más relevantes de España: Segovia, Les Ferreres de Tarragona y los Milagros de Mérida.

RUTA DEL AGUA Y ACUEDUCTO ROMANO 

DE PEÑA CORTADA

SENDA DEL AGUA

PRV - 92

PRCV - 92

CHELVA - CALLES

VALENCIA

Sobre los términos de Tuéjar, Chelva, Calles y Domeño se encuentran los restos de una colosal obra romana, el acueducto romano de Peña Cortada. Éste fue trazado con distintos sistemas de conducción de aguas que, desde su origen en el río Chelva, salvan grandes escollos topográficos. La longitud de los restos hallados es de 28,6 kilómetros, siendo su entidad comparable con los acueductos romanos más relevantes de España: Segovia, Les Ferreres de Tarragona y los Milagros de Mérida.

En el acueducto de Peña Cortada coexisten dos tipos, el de acueducto puente y el de acueducto viaducto. En el primero e aúnan las técnicas ya resueltas del puente y del arco honorífico o triunfal que aquí se emplean sobre todo para salvar la rambla de Alcotas y el barranco de la Cueva del Gato con la monumentalidad requerida por sus autores para magnificar el poderío de su imperio. En el segundo tipo de acueducto de circulación libre por caudal, canalis structilis, que Vitrubio aconseja cubrirlos para conservar mejor sus propiedades (que se aboveden para que el sol no alcance el agua), se despliega aquí, en su tramo excavado en roca, el dominio técnico romano en cuanto a sistemas de conducción de aguas, suficientemente demostrado en acueductos de tal importancia como Aqua Marcia, Aqua Appia y Aqua Iulia entre otros muchos.

Fuente: Acueducto Romano de Peña Cortada

COMO LLEGAR

Chelva, la capital de la comarca de Los Serranos. Situada a algo menos de 70 kilómetros de Valencia, llegaremos hasta la ciudad por la carretera CV-35 en dirección Ademuz. Se trata de una localidad con mucha historia, que descubrirás cuando vengas.

COMO LLEGAR A CHELVA

DONDE COMER Y DORMIR

La serranía de Chelva obsequia a sus visitantes con sabrosos platos típicos como las gachas, el pucherico espeso, el gazpacho chelvano y los embutidos de orza. Además, encima de la mesa nunca falta un pan crujiente y horneado a fuego de leña. Los postres tienen en cuenta los gustos de todos. La repostería endulza el paladar del comensal y con productos como los rollicos de aguardiente, la torta de almendras o unas sabrosas magdalenas llamadas "mariquitas".

Pucherico espeso en el bar restaurante Los Pacos (Chelva). Foto extraida del blog con Paco Carrera

DONDE COMER EN CHELVA

Chelva cuenta con una buena infraestructura en cuanto al descanso, donde podremos elegir entre hoteles, casas rurales y apartamentos donde poder pasar un fin de semana muy agradable.
Nosotros optamos por quedarnos a dormir en los aparcamientos que hay en el inicio de la ruta.

DONDE DORMIR EN CHELVA

FURGOPERFECTO

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO

Plano detallado del recorrido. Fuente: Wikiloc

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS

OTROS DATOS DE INTERÉS

Dificultad: Fácil/Moderado
Sendero señalizado: Si
Época recomendable: Todo el año
Fecha de la excursión: 23 de Marzo del 2019
Puntos de agua potable: Nos podemos encontrar varias fuentes, pero sus aguas están sin tratar.
Sugerencias: Llevar en una mochila agua y comida energética. Utilizar ropa y calzado adecuados, dependiendo de la época elegida. Deja la basura en los contenedores. Respeta la fauna salvaje, el ganado, la vegetación y el patrimonio. Si vas en verano no te olvides de protección solar, (gorra, gafas y protección para la piel). Extremar la precaución en el paso del acueducto.
Cartografía: IGN Higueruelas hoja 666-II E: 1:25.000
                       IGN Chelva hoja 666-IV E: 1:25.000
Enlaces de interés: Chelva Turismo (Facebook)
                                   Acueducto Romano de Peña Cortada a vista de dron
                                   Ayuntamiento de Chelva
                                   El acueducto Romano de Peña Cortada (toda la información)
                                   Centro excursionista de Chelva
                                   Mas información de la ruta en Wikiloc
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Iniciamos la ruta en el área recreativa Molino Puerto, ubicada bajo la localidad de Chelva. El área recreativa cuenta con paelleros, aseos, bancos y mesas, chiringuito y un área de juegos para los más pequeños.

PUNTO DE PARTIDA DE LA EXCURSIÓN

Desde el área recreativa comenzaremos nuestro recorrido tomando una pequeña pasarela que parte a la izquierda antes de cruzar el río, dejando el área recreativa a nuestra espalda.

El sendero es claro, cómodo y no presenta ninguna dificultad. Pasamos bajo un bonito puente que salva el río Tuéjar, y nos adentramos en un delicioso bosque de ribera dominado por la sombra de los chopos y los eucaliptos. La senda nos permite acercarnos puntualmente a la orilla del río.

Seguimos junto al río y dejaremos a nuestra derecha un nuevo puente que cruza su cauce, y un poco más adelante pasaremos junto a las instalaciones de la depuradora municipal. Recorridos unos 800 metros desde el área recreativa de Puerto Molino llegamos a la Fuente del Cuco, donde enlazaremos con el recorrido del PR-CV 92.

Obviaremos la senda que nace detrás de la fuente y tomamos a la derecha una pequeña pasarela de hormigón que cruza el río.

Ascendemos de forma continuada durante 250 metros por una senda bastante ancha y adornada con barandillas y escalones de madera hasta alcanzar un mirador desde donde se obtiene una panorámica privilegiada observándose parte de la historia de Chelva, el Pico del Remedio (1054 m.), La Torrecilla, yacimiento arqueológico de época almohade (siglo XII), torre vigía reutilizada hata las guerras Casrlistas y las cuevas del Montecico, que se encuentran excavadas en los farallones que tenemos enfrente.

También destacan las curiosas formaciones calcáreas de las terrazas fluviales del río. Estas cuevas excavadas en la paredes, de las que se pueden encontrar más ejemplares río arriba, en "La Luz", y cuyo origen prehistórico resulta hoy día aún difícil de determinar, aunque si constaba que estubiesen habitadas en los momentos finales de la época árabe, siglos XII y XIII, utilizándose como almacén de grano y refugio en momentos de enfrentamientos.

Desde el mirador, y siguiendo las indicaciones de Ruta del Agua, abandonamos el PR-CV 92 que seguiría recto, nosotros tomamos una senda descendente, escalonada y con barandillas de madera, que sale a la derecha del mirador, que nos lleva de nuevo al cauce del río. 

Ahora la senda vuelve a protegernos por una exuberante vegetación y con las aguas del río Tuéjar a nuestra izquierda. En este tramo de sendero podremos apreciar las formaciones geológicas que se forman en el cañón, también tendremos oportunidad de ver los conglomerados que destacan en el camino y muchas mas cuevas viviendas de época árabe.

Y con esta tónica llegamos a la Fábrica de la Luz, a la que se canalizaba el agua procedente de la presa de Olinches para generar la electricidad. La fábrica de la luz, hoy en ruinas y oculta entre la vegetación, estuvo en funcionamiento hasta principios de los 80 y es un símbolo del patrimonio hidráulico de Chelva.

Chelva fue el primer pueblo de la comarca que tuvo energía eléctrica, gracias a las tres centrales que se construyeron aprovechando la energía hidráulica.
La primera se ubicó en el "Molino del Peludo", cerca de la playeta, a principios de 1900, llamándose "Hidroeléctrica Chelvense". A los pocos años se construye la segunda central, ya en este paraje, y en los años 20 se amplía para crear "Luz y Fuerza del Chelva", que abasteció a los municipios de Chelva, Calles, Domeño, Loriguilla y Villar del Arzobispo.Esta central fue ampliándose, construyéndose en 1952 el canal principal desde el paraje de Olinches, que recogía el agua hasta el salto excavado en la roca. Funcionó hasta 1981, año en que pasó a depender de Iberdrola.

Pasada "La Luz", seguimos por el sendero rodeados de bosque de ribera, hasta que el camino empieza a tornar ascendente y con escaleras. En este punto nos desviamos a la derecha por una estrecha senda que va paralela al río. Desde este punto seguiremos caminando siguiendo las indicaciones que se nos presentan en todos los cruces, tomando como referencia la "Ruta del Agua". Esta sección es muy variada, subiremos, bajaremos, bordearemos algunas fincas particulares, subiremos en fuerte pendiente algunas escalinadas, volveremos a bajar al río y así de esta forma llegaremos sin problemas al pueblo de Calles.

Ya en Calles, seguiremos la carreterilla que pasa pegada a una zona de huertas hasta llegar a un gran puente que se dirige hacia Calles. Aquí confluyen  varias calles. Nosotros tomaremos la calle que sale a la izquierda que se dirige hacia el Barrio de los Molinos. En este punto nos encontraremos las primeras indicaciones que nos llevan al Acueducto de Peña Cortada.

Subimos toda la calle y salimos a la carretera que hace de circunvalación al pueblo de Calles. Justo enfrente tenemos la ermita de Santa Quiteria. Torcemos a la izquierda y subimos un poco para cruzar al otro lado y meternos en el Barrio Loma Ermita. Todo el camino está bien señalizado y no hay lugar a perdidas.

Cruzamos todo el barrio y al final de sus casas, la carreterilla se bifurca en dos, nosotros tomamos hacia la derecha, donde una pequeña cabaña de madera, de información, nos indica el buen camino. Nos dirigimos por una ancha pista hacia la rambla de Alcotas, pasando bajo la autovía CV-35

Tras pasar bajo la autovía, avanzamos en un principio llaneando, sorteando los regatos que se nos presentan por unos puentes improvisados que hacen que no nos mojemos los pies. Luego el camino se vuelve ascendente, encontrándonos unos postes indicadores de PR: Nosotros tomaremos la dirección hacia Torre Castro. Y así llegamos a la fuente del Sapejo, donde nos refrescaremos, comeremos algo y descansaremos un ratin antes de continuar.

Ahora la pista se convierte en una senda y el barranco por el que discurre nuestra marcha se va convirtiendo, poco a poco, en una estrecha garganta. El sendero, acondicionado por unas vallas quitamiedos, nos lleva, cruzando un puente, a la margen izquierda del barranco y tras una fuerte subida en zig-zag, llegamos a un mirador que nos permite ver por donde hemos subido, las vistas son fantásticas.

La senda se vuelve totalmente ascendente, salvando un importante desnivel. Gran parte del camino de acceso está escalonado y de vez en cuando hay miradores con paneles explicativos desde donde se obtienen excelentes vistas sobre la Peña Cortada y la zona de túneles excavados en la rota.

Seguimos subiendo y nos sorprende el corte en la roca que le da nombre a este monte. Y así poco a poco, y subida tras subida, llegamos al inicio de la canalización romana. Justo antes de recorrerla un pequeño rellano con bancos y paneles explicativos nos ayudan a comprender y valorar este patrimonio que ha llegado hasta nuestro días.

Subimos un poco más y nos metemos de lleno en la canalización. En un primer lugar la recorremos hacia la derecha unos cientos de metros hasta que por este lado se difumina.

LA CANALIZACIÓN Y EL ACUEDUCTO ROMANO

De época romano-imperial, s. I d.C., está considerado en cuarto lugar entre los de la Península Ibérica, con un acusado carácter y peculiaridad por la impresionante grieta artificial excavada a pico a lo largo de toda la montaña de piedra caliza. Un gran puente que salva el barranco de la cueva del Gato, con dos gruesos pilares de 27 metros de altura y dos enormes muros apoyados en los flancos del barranco, sobre los que se apoyan tres arcos de medio punto por encima de los que discurre el canal.
La Peña Cortada propiamente dicha es un profundo tajo excavado en la roca, de 22 metros de altura por 26 de longitud, abierto por los romanos para dar paso al canal que conducía las aguas, posiblemente, desde Chelva hacia la actual Llíria.
Para la construcción del canal tuvieron que ser realizados un total de 11 túneles, excavados a pico en la roca, que suman unos 300 metros de longitud, con una altura media de 1,80 metros y una anchura de unos 80 centímetros, con ventanal abiertos en las paredes de roca de tramo en tramo.

Fuente: Rutas con Historia

Al acabar, nos damos la vuelta y empezamos a pasar por los túneles del viaducto tallados en la misma roca. Sin darnos cuenta nos encontramos inmersos en los túneles, ventanas en la roca, espacios abiertos sobre los precipicios  y pasos por donde antiguamente discurría el agua. Sin duda un lugar espectacular.

Salimos de los túneles y llegamos a la Peña Cortada, impresionante grieta que le hicieron a la montaña para salvar la dificultad. Cuando la atraviesas, algo verdaderamente impresionante pasa por tu cuerpo.

Atravesamos la peña  y salimos a la parte alta del Puente, que salva el barranco del Gato. Fantástica visión del acueducto. Tiene una longitud de unos 50 metros, una altura de 25 metros y una anchura de 2 metros. Cuando lo atraviesas, es verdaderamente sobrecogedor, por todo, por lo especial, por lo antiguo, por la altura y por todo, todo.

Lo cruzamos, y continuamos por un sendero estrecho y algo aéreo que nos llevará hasta al aparcamiento de los coches que vienen desde Chelva. En este punto, por la Rambla de Alcotas, podemos llegar fácilmente a su base, donde podremos observarlo desde abajo, que aún es más impresionante si cabe.

Acueducto de Peña Cortada visto desde el Barranco del Gato. Foto propiedad de: jdiezarnal y extraído de la web Acueducto de Peña Cortada

Tras contemplarlo en todo su esplendor, volvemos al aparcamiento, y desde su fondo tomamos una pista que enseguida tendremos que dejar, para tomar un sendero que parte a la izquierda. Ahora el camino es muy monótono y algo pesado hasta llegar a la parte alta de Chelva. No tendremos pérdida, solamente seguiremos las indicaciones y sin problemas llegaremos a una gran explanada.

En la explanada, tomaremos el sendero que continúa justo enfrente nuestra  y que se dirige hacia la parte trasera del cementerio. Lo bordeamos y salimos a la plaza de toros. Ahora descendemos por la carretera CV-346 hasta la confluencia con la calle Monserrate y donde una pequeña ermita ubicada en la intersección de dos carreteras nos dice que vamos por el buen camino. Al llegar a la ermita tomamos la carretera de la derecha, que se dirige hacia uno de los lavaderos del pueblo.

Ya solo nos queda atravesar lo que queda de pueblo para llegar hasta la Calle San Joaquín, que poco a poco nos acercará hasta el área recreativa de Molino Puerto y donde tenemos estacionado nuestro vehículo.

Y así damos por concluida esta magnífica excursión por uno de los lugares más especiales de la Comunidad Valenciana, digna de ser conocida y andada.

Los excursionistas al completo