Excursión hasta Piedra Escrita (Cenicientos - Madrid)

Se trata de una piedra de granito, de unos 7 metros de altura y 9 metros de circunferencia. En su lado occidental hay labrada una hornacina de cabecera semicircular, en cuyo interior puede apeciarse una escena con dos personas frente a una tercera, ataviadas con ropas talares romanas. A sus pies se sitúan dos siluetas borrosas de animales, posiblemente correspondientes a un bóvido y un óvido o cáprido echados. A la izquierda del espectador se aprecia una inscripción, que se interpretó inicialmente en
EXCURSIÓN HASTA PIEDRA ESCRITA

CENICIENTOS
MADRID


Se trata de una piedra de granito, de unos 7 metros de altura y 9 metros de circunferencia. En su lado occidental hay labrada una hornacina de cabecera semicircular, en cuyo interior puede apreciarse una escena con dos personas frente a una tercera, ataviadas con ropas talares romanas. A sus pies se sitúan dos siluetas borrosas de animales, posiblemente correspondientes a un bóvido y un óvido o cáprido echados. A la izquierda del espectador se aprecia una inscripción, que se interpretó inicialmente en minúsculas y de época medieval, con el texto "A las tres Marías". Por ello el monumento se pensaba de esta época, en relación con la iglesia del siglo XIII que allí había existido. Algunos años más tarde, en 1995, la epigrafista de la UAM Alicia M.Cato reconoció la inscripción romana que subsistía bajo diversos retoques medievales y pudo leerla, resultando ser la dedicatoria votiva de un particular en agradecimiento a la diosa Diana, con el texto: A (nimo) I (ibens) S (olvit votum) . SISC (nius?), Q (uietus? -uartus?) Dianae, con lo que el monumento sería primeramente un oratorio rupestre romano, a modo de santuario rural. En la edad media, ya más borroso todo, viéndose en él tres figuras con ropas largas, fue interpretado como las tres Marias del Nuevo Testamento, retocándose la inscripción para que así lo dijera. Indicó una serie de paralelos para este tipo de santuarios, especialmente el muy conocido de las afueras de Segóbriga, dedicado también a Diana (aunque en su variante de cazadora), que cuenta con una serie de hornacinas grabadas muy similiares.
Fuente: Wikipedia

COMO LLEGAR


Una de las alternativas para llegar a Cenicientos es por la carretera de Extremadura. Iremos por la N-V hasta la salida 32 dirección a Navalcarnero/Aldea del Fresno/Brunete y enlazar con la M-507, que lleva a Cadalso de los Vidrios donde se coge la M-541. A la altura de la gasolinera de Cadalso, tomamos la carretera hasta llegar a Cenicientos.


DONDE COMER Y DORMIR

Tapas en el bar restaurante La Carpintería. Fuente: Sluurpy
La calidad de sus productos locales hacen que su gastronomía sea muy rica y variada y maride a la perfeción con unos vinos cargados de sabor y tradición, que haran las delicias de los mas exigentes. Podremos encontrar todo tipo de restaurantes donde nos podrán servir comida rápida o típicos platos de la zona.


DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO



CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS


OTROS DATOS DE INTERÉS

Índice IBP: 32
Dificultad: Fácil.
Sendero señalizado: No
Época recomendable: Todo el año
Puntos de agua potable: No hay fuentes en todo el recorrido, pero podemos comprarla en algún bar o tienda en Cenicientos
Sugerencias: Llevar en una mochila agua y comida energética. Utilizar ropa y calzado adecuados, dependiendo de la época elegida. Deja la basura en los contenedores. Respeta la fauna salvaje, el ganado, la vegetación y el patrimonio. Si vas en verano no te olvides de protección solar, (gorra, gafas y protección para la piel). 
Cartografía: IGN Cadalso de los Vidrios hoja 580-I E:1:25000
                      IGN Almorox hoja 580-III E: 1:25000
Enlaces de interés:  Oficina de turismo en Cenicientos (Web oficial)
                                   Yacimiento Piedra Escrita en Cenicientos (Comunidad de Madrid)
                                   Vídeo de Piedra Escrita y su entorno (Youtube)
                                   Más información de la ruta (Wikiloc: trayecto, descarga de track, etc.)
                                   

EL ITINERARIO

Para llegar a este amable rincón natural debemos partir desde el centro urbano. Nosotros estacionamos nuestro vehículo en la calle de la Ermita, justo en frente de la ermita de la Virgen del Roble, y a los pies de la fuente del Roble. Aquí en este punto comenzamos nuestra excursión.



Se trata de una fuente cuya agua brota del manantial que lleva el mismo nombre. Es una construcción en piedra compuesta por el cuerpo central en donde encontramos el caño de agua limpia y el abrevadero, construido en piedra, cn un acceso al caño. Ubicada en las proximidades del Roble de la Virgen, su interés estriba en que antiguamente abastecía de agua a las gentes del pueblo, tanto para consumo humano como para el ganado, convirtiéndose en un punto de reunión para los vecinos. Ha sido remodelada en el año 2005.
Tras esta pequeña descripción, comenzamos caminando por la calle de la Ermita tomando todo recto hasta que llegamos a la Iglesia de San Esteban de la Encina, que antes de continuar con la excursión pasamos a visitarla.


Este edificio gótico construido a finales del siglo XV o comienzos del XVI, está declarado como bien de interés cultural desde el año 1983. El conjunto se compone de un cuerpo principal alargado al que  se adosa, siguiendo la orientación canónica, una cabecera poligonal a oriente y una torre cuadrada a los pies. En su interior se exponen colecciones temporales, que cuando estuvimos nosotros estaba dedicada al cielo y el infierno.






Tras contemplar las obras, salimos de la iglesia por su puerta lateral y nos precipitamos por la calle Dr. Piga hasta que llegamos a la Plaza de la Independencia.


Cruzada la plaza, seguimos de frente por la Calle Escalona, desembocando en la M-544, que tendremos que cruzar para coger la calle Herren de la Paloma, que poco a poco nos irá alejando de las construcciones del pueblo para introducirnos en la naturaleza.


Cuando llegemos a la pista principal, la tomamos a la izquierda y la recorremos 700 metros, dejando atrás varias granjas que hay en esta zona. Para tomar otra pista que sale a mano derecha, dejando de frente la pista principal. Este otro camino nos deja en un bonito puente romano que salva el arroyo de los Molinillos.




Una vez visto el puente romano, seguimos avanzando por este sendero unos 200 metros, para salirnos por la izquierda, dejando el sendero principal y atrochando monte a través por estrechos caminos, que desembocan en la zona denominada "Las Ollas", lugar pintoresco que hace el arroyo de Los Molinillos.




Sobrepasamos Las Ollas con mucho cuidado, ya que a parte del agua, la roca esta muy pulida en esta zona y puede provocar que nos resbalemos al intentar cruzar el arroyo. Justo pasado este curso de aguas nos sorprenderá encontrar un pequeño acueducto que se dirige hacia un antiguo molino, el molino Vidal.







Bordeamos el prado que está donde el molino y salimos por la parte alta del mismo y por la derecha, que nos dejará en el final de otra pista. Ahora la seguimos hasta su final y monte a través, tomando dirección Este, remontamos un pequeño torrente o cauce de aguas muy abierto hasta que desembocamos en otro camino principal.



Una vez en el camino principal torcemos a la derecha y seguiremos este sendero que va delimitando en todo momento la finca Molino Piedraescrita. Iremos descendiendo hasta cruzar de nuevo el arroyo de los Molinillos por unas losas grandes que hacen las veces de puente. Tenemos que añadir, que al inicio del vallado de la finca "Molino de Piedraescrita", se nos acoplo una amiga muy amable que nos acompaño en toda nuestra excursión.






Tras el puente de losas, desembocamos en otro camino que seguiremos sin perdida alguna hasta que lleguemos a un cruce de caminos. Seguiremos rectos, con la misma tónica de siempre, seguir la alambrada de la finca, hasta llegar a su entrada principal. La sobrepasamos por la derecha por un estrecho sendero que seguiremos sin pérdia alguna hasta llegar a otro cruce de caminos. 



En este cruce, seguimos rectos, dejando a la izquierda una finca donde el paisano tiene una caravana. Continuamos hasta que la pista se acaba en una puerta que da a una finca. La sorteamos por un pequeño sendero a la izquierda y seguimos el cauce del arroyo hasta que este acaba en el agua.



Cruzamos el arroyo como podemos y, de esta forma accedemos a la finca particular donde se encuentra la piedra escrita. Recorremos el corto tramo desde el río a la piedra, nos fotografiamos, comemos algo y acto seguido desandamos todo el trayecto hasta llegar de nuevo a la confluencia del camino realizado.





Justo enfrente de Piedra Escrita hay un pedrolo que se parece mucho a los toros de Guisando. No lo creemos, pero todo puede ser. ¿Tu que crees?.


Una vez en el punto donde nos desviaríamos hacia el molino Vidal, tenemos que echar a nuestra compañera de excursión, ya que si no fuese así, se vendría con nosotros hasta el pueblo, y la verdad, nos daba miedo que algún coche le diera un golpe. Ya solos, y echando de menos a la amiga, seguimos rectos por la pista, que es el camino de Piedraescrita.




Solo tenemos que seguir la pista pasando junto a los campos de fútbol y de algunas granjas, hasta topar de nuevo con la  carretera M-544.


Cruzamos la M-544 y nos introducimos por la Calle de la Rda. del Este, que seguiremos para chocar con la calle Real. En este punto torcemos a la izquierda y seguimos toda la calle hasta que de nuevo torcemos a la derecha por la Calle de Praga, que va a dar de nuevo con la iglesia de San Esteban de la Encina.


Torcemos a la derecha y como es camino conocido, llegamos sin problemas hasta nuestro vehículo. Pero antes de concluir la excursión, nos acercamos a disfrutar de la Ermita de la Virgen del Roble, que a estas horas si que está abierta.




Esta ermita construida en el siglo XV y sometida a continuas reconstrucciones, está consagrada a la Virgen del Roble, patrona de Cenicientos y cuyas fiestas se celebran del 13 al 17 de agosto. Edificada en sillería, presentaba tres naves cubiertas con bóvedas separadas por arquería sobre columnas cerrándose el crucero con un cimborrio.Tiene una entrada protegida por un pórtico con tres vanos y el cojunto se remata por una espadaña con dos huecos situada entre bolas herrerianas y coronado con un frontón.





Cabe destacar los jardines en los que encontramos lápidas del antiguo cementerio del pueblo, así como la Cruz situada debajo del Roble de la Virgen y el Vía Crúcis que se extiende a lo largo de la avenida que da acceso al edificio. Próximo a la ermita, en el parque de la Reverencia se sitúa una cruz de hierro del siglo XII encontrada bajo la iglesia.



Tras disfrutar de uno de los platos fuertes de la excursion, la visita a la ermita y los jardines de la ermita Virgen del Roble, damos por concluida esta magnífica ruta que nos ha llenado en todos los sentidos.


9 comentarios:

  1. Hola. Acabo de descubrir vuestro blog. Me lo guardo en favoritos para coger ideas de excursiones por los alrededores. Saludos

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    1. Buenas noches, nos alegra que te pueda servir. Un saludo y mil gracias por tus palabras.

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  2. La próxima vez que hagáis una ruta por Madrid os recomendamos hacer la que sale de nuestro pueblo que llega hasta el mirador de Valdelaganar

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    1. Buenas tardes Ventanal de la Sierra. Tu recomendación nos la apuntamos para una próxima excursión, ya que no conocemos esta ruta. Un saludo y muchísimas gracias por enseñarnos nuevos lugares.

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  3. La piedra que indicáis al final, parece ser un verraco celta:
    https://drive.google.com/file/d/1XyC0ff_bwZsPPB7n2OqXBSpvtD8kW2FB/view

    Saludos,
    Fernando

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    1. Muy agradecidos Fernando, por ampliar la información en cuanto al verraco Celta. Lo comparábamos con los Toros de Guisando, pero ahora nos ha quedamo claro. Un abrazo y de nuevo mil gracias pòr la aportación.

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  4. Muy buenos lugares para visitar, qué buenas pinturas encontraron en ese lugar.

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