Ruta minera por La Nava de Jadraque (La Nava de Jadraque - Guadalajara)

Estamos en una tierra minera por excelencia donde ya los romanos explotaron el oro y la plata. A comienzos del pasado siglo la comarca vivió una fiebre extractora que la convirtió en una de las más pobladas de Castilla. Cuentan las crónicas de la segunda mitad del siglo XIX que se les atribuía un valor fabuloso a las minas de oro de La Nava de Jadraque (actual pedanía de El Ordial), cuyas extracciones eran transportadas, en caballerías, hata la Fábrica de Fundición la Constante, en la ribera

LAS MINAS DE LA NAVA DE JADRAQUE

ANTIGUAS EXPLOTACIONES DE ORO
LA NAVA DE JADRAQUE
GUADALAJARA


Estamos en una tierra minera por excelencia donde ya los romanos explotaron el oro y la plata. A comienzos del pasado siglo la comarca vivió una fiebre extractora que la convirtió en una de las más pobladas de Castilla. Cuentan las crónicas de la segunda mitad del siglo XIX que se les atribuía un valor fabuloso a las minas de oro de La Nava de Jadraque (actual pedanía de El Ordial), cuyas extracciones eran transportadas, en caballerías, hasta la Fábrica de Fundición la Constante, en la ribera del río Bomova, para su trituración y refinado, donde se realizaba todo este mismo proceso a la plata extraída en las minas de Hiendelaencina. Las Navas de Jadraque cuenta en su río, el Cristóbal, con un antiguo lavadero de oro, además de restos de una calzada romana.

COMO LLEGAR


La Nava de Jadraque se encuentra situada en la Sierra Norte de Guadalajara, en un valle a los pies de la Cabrera, entre el Alto Rey y el Pico Oceón. Está ubicada en el término municipal de El Ordial, perteneciente a la provincia de Guadalajara, en la comunidad autónoma de Catilla La Mancha.



DONDE COMER Y DORMIR

Asado de lechazo. Fuente: Vereda de la Puebla
Dos factores condicionan sobremanera la riqueza y variedad de la gastronomía de la provincia de Guadalajara, no suficientemente conocida, pero si admirada y muy valorada por quienes han tenido el privilegio de degustarla: la diversidad de culturas que se han asentado a lo largo de los siglos en éstas tierras, dejando cada una de ellas su herencia gastronómica y la personalidad geográfica diferenciada de las comarcas de la provincia, factor que implica, por una parte, variedad en los productos agro alimentarios  típicos de unas comarcas respecto a otras y diversidad en la forma de tratarlos en la cocina. Así en la Campina: espárragos, hortalizas, cereales y maiz, aves de granja y huevos frescos. En las Serranías: carne de vacuno, caprino y ovino.



DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO


CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS


OTROS DATOS DE INTERÉS

Índice IBP: 26
Dificultad: Fácil.
Sendero señalizado:  No
Época recomendable: Todo el año
Puntos de agua potable: No hay fuentes en todo el recorrido.
Sugerencias: Llevar en una mochila agua y comida energética. Utilizar ropa y calzado adecuados, dependiendo de la época elegida. Deja la basura en los contenedores. Respeta la fauna salvaje, el ganado, la vegetación y el patrimonio. Si vas en verano no te olvides de protección solar, (gorra, gafas y protección para la piel). Extremar la precaución al acercarte a los hundimientos que hay por toda la zona.
Cartografía: IGN Bustajes hoja 0460-I E:1:25000
Enlaces de interés:  Ayuntamiento de La Nava de Jadraque (Wed oficial)
                                   Las antiguas labores mineras de La Nava de Jadraque (PDF)
                                   La Nava de Jadraque (Wikipedia)
                                   Sendero de oro y arcilla (Senderos de Guadalajara PDF)
                                   Vídeo La Nava de Jadraque (Youtube)
                                   Otras excursines por La Nava de Jadraque (Wikiloc)
                                   Más información de la ruta (Wikiloc: trayecto, descarga de track, etc.)
                                   

EL ITINERARIO

Comenzaremos nuestra excursión en la calle Francis Tomey, frente a la casa consitorial. Aquí hay suficiente espacio para dejar nuestro vehículo. Hay que intentar no molestar ni obstaculizar el paso de tractores y vehículos que pasan para abastecer a las explotaciones ganaderas que hay por la zona.



Salimos del pueblo por la pista que va bordeando por la izquierda el Cerro del Castillar. Según avanzamos de forma pausada, nos vamos encontrando grandes prados donde pastan las vacas a sus anchas, sin prisas. En este trozo de camino tendremos bonitas vistas del Cerro del Castilla a nuestra derecha.




Avanzamos cómodamente por la pista, sin desnivel, hasta que llegamos a una explotación ganadera. Esta se encuentra a 1 kilómetro del pueblo. La pasamos, y tras cruzar la puerta que delimita la ganadería torcemos a la derecha. Al principio sin camino aparente, pero enseguida nos encontramos una pista que se dirige hacia el Barranco de Los Vallejos.



Esta pista que daba servicio a las explotaciones mineras, ya no tiene pérdida.  La seguiremos hasta que a los 400 metros vadeamos un pequeño arroyo. Seguimos otros 800 metros y nos encontramos con un cruce de caminos. Nosotros primero torcemos a la izquierda y nos acercamos a ver una gran escombrera, utilizada por los trabajadoes para dejar lo estéril de las explotaciones. Desde esta parte del camino tendremos unas bonitas vistas de la mina Paquita, que se encuentra en la otra vertiente del monte.



Tras la escombrera, retrocedemos al cruce y nos precipitamos pista abajo hacia el Barranco y arroyo de los Vallejos. Justo antes de cruzarlo, torciendo a la derecha y transitando monte a través llegaremos a la mina California. En toda la zona se aprecian las escombreras , los hundimientos, los pozos y los socavones de la explotación de oro. Al otro lado del arroyo e igualmente monte a través, andando entre jaras y matojos llegamos a la mina San José. Entre ambas minas, podemos parar un rato en alguna de sus escombreras para ver si encontramos algo de oro, que igual con un poco de suerte si que lo encontramos. Para ello, lo mejor es llevar un martillo y dedicarse a romper el cuarzo a la espera de encontrar una gran pepita de oro que nos saque de pobres......QUIEN SABE...





Tras disfrutar como antiguos mineros, y traernos las sacas llenas del apreciado oro, desandamos el camino echo hasta llegar de nuevo a la explotación ganadera. Ahora, en vez de ir al pueblo, tomamos a la derecha la pista ancha y polvorienta que nos  hace pensar en esos mineros que la recorrian a diario para ir al tajo. Al cabo de 400 metros, y hacia la derecha, también monte a través, nos encontramos la mina Juanita, donde nos impresionaran sus pozos. Estos pozos tienen todo el perímetro vallado con alambrada, pero en algunos de ellos están muy mal conservados, e incluso no existiendo tal protección, por lo que hay que extremar la precaución.


Vista la mina Juanita, volvemos a la pista y, continuamos por el camino principal, sin tomar ningun ramal hasta que a escasos 700 metros se nos abre otra pista hacia la derecha, que tendremos que tomar.


Toda la zona se encuentra repleta de carteles donde nos avisan del peligro del lugar, ya que hay muchos pozos y zanjas mineras que pueden pasar desapercibidas y tenemos probabilidades de caer dentro. 


Tomamos la pista a la derecha y enseguida llegamos a la mina Paquita. Esta explotación era una de las más grandes de la zona. Aún se conserva, aunque en estado ruinoso, alguna construcción sobre el pozo maestro. Hay que destacar la gran escombrera que hay a pie de mina. 


Es espectacular el patrimonio minero que hay en la zona. Disfrutamos mucho con la visita y nos encantó buscar ese oro que tanta sangre y sudor costó a los trabajadores de las minas de oro de La Nava de Jadraque.....

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