PASSADIÇOS DO PAIVA (Espiunca - Portugal)

 RUTA POR LOS PASSADIÇOS DO PAIVA

MUNICIPIO DE AROUCA

ESPIUNCA - AREINHO

PORTUGAL

Los Passadiços del Paiva se encuentran en la margen izquierda del río Paiva, en el municipio de Arouca, distrito de Aveiro, Portugal. son 8 kilómetros que ofrecen un paseo "sin tocar el suelo" rodeado de una belleza única, un auténtico santuario natural a lo largo del cual veremos las aguas bravas del Paiva, cristales de cuarzo y especies en peligro de extinción. La ruta se extiende desde las playas fluviales de Areinho y Espiunca,  situada entre ambas la playa Do Vau. Esto es un viaje a través de la biología, la geología y la arqueología que se mantendrá, por supuesto, en el corazón, el alma y la mente de cualquier amante de la naturaleza. El territorio del Arouca Geopark está reconocido por la UNESCO como Patrimonio Geológico de la Humanidad.

COMO LLEGAR

Hay acceso en los dos extremos del recorrido, siendo posible comenzar o terminar en cualquiera de los dos: Espiunca o Areinho. Si comenzamos en Areinho esta son las coordenadas del comienzo de la ruta (GPS: 40.952916 -8.176940), o si por el contrario comenzamos en Espiunca es aquí donde se encuentra el aparcamiento y donde comienza la excursión,(GPS: 40.993366 -8.213974).

Hay otra posibilidad, y es comenzar en lo alto del acantilado, junto al puente peatonal Arouca Bridge, un puente sobre el río Paiva de más de 500 metros de longitud y suspendido unos cuantos cientos de metros del cauce el río. (Coordenadas GPS: 40.959541 -8.182370)

DONDE COMER O DORMIR

Nosotros elegimos para dormir el parking que hay justo donde comienza la ruta de los Pasadizos del Paiva, en la parte de Espiunca. Un lugar muy tranquilo y poco conocido, donde puedes estar con tu furgo sin ningún tipo de problemas.

FURGOPERFECTO

DONDE DORMIR CERCA DE  ESPIUNCA

DONDE DORMIR CERCA DE AREINHO

Caldo verde de Espiunca. Foto:Restaurante Guru

La gastronomía en esta zona de portugal está muy arraigada a la buena carne, donde es típico el cordero tierno cocinado en un tiesto de arcilla. También están muy ricos los huevos blandos, el famoso bacalao o las carnes a la brasa de influencia brasileña, como la picanha, así como las ensaladas y las magníficas patatas en todas sus variantes.

DONDE COMER O CENAR EN ESPIUNCA

DONDE COMER O CENAR EN AREINHO

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO

MAPA DEL RECORRIDO

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS

OTROS DATOS DE INTERÉS

Índice IBP: 33

Informe detallado IBP index

Dificultad: Fácil, ideal para toda la familia.

Sendero señalizado: No hace falta, es solo seguir las pasarelas

Época recomendable: Todo el año

Puntos de agua potable: No hay fuentes en todo el recorrido. 

Sugerencias: Llevar en una mochila agua y comida energética. Utilizar ropa y calzado adecuados, dependiendo de la época elegida. Deja la basura en los contenedores. Respeta la fauna salvaje, el ganado, la vegetación y el patrimonio. Si vas en verano no te olvides de protección solar, (gorra, gafas y protección para la piel). 

Cartografía: 

Enlaces de interés:  Passadicos do Paiva (Web oficial: localización, precios, aparcamiento, etc)

                                   Taxis Passadicos do Paiva (Facebook)

                                   Vídeo Passadicos do Paiva (Youtube)

                                   Más información de la ruta (Wikiloc)
                                   Descargate el track para GPS (archivo GPX)

                                   Descargate el recorrido para Google Earth (archivo KML)

EL ITINERARIO

Para realizar esta ruta nosotros recomendamos el sentido Areinho-Espìunca, ya que hay mucha menos subida y se lleva mejor. En sentido contrario es mucho más duro. Para comenzar en Areinho, podemos dejar el coche en Espiunca y coger un taxi, (hay parada al comienzo de la ruta, en ambos sentidos) que nos acerque hasta el comienzo de la ruta por Areinho. El trayecto sale unos 15 euros. Tambien se puede hacer dejando el coche en el inicio y al finalizar la ruta en Espiunca, tomar el taxi hasta donde tenemos nuestro vehículo.

Comenzamos la ruta en Areinho, para lo cual dejaremos el coche en el párking superior, ya que es más amplio. Existe otro en la parte baja, pero suele estar lleno de vehículos. Desde el párking superior, cogemos un sendero de tierra que nos acerca al inferior, donde hay un baño y un bar. A partir de aquí comienzan las pasarelas, Comenzamos a caminar y pronto  llegamos al puente de Alvarenga. A partir de aquí, comienza una sucesión de escalones de madera, que nos hace pensar, si realmente merecerá la pena el esfuerzo. Os podemos asegurar, que según se va ganando altura la belleza del paisaje es cada vez mayor. Por tanto, si que os recomendamos el esfuerzo y subir, cada uno a su ritmo y con paciencia. Son más de 100 escalores, pero no es tan duro como lo pintan.

Una vez arriba, antes de adentrarnos en la impresionante garganta que ha excavado el río Paiva a lo largo de millones de años, nos encontramos con el control de acceso, que se encuentra en una zona llana formando un mirador espléndido, desde donde podremos divisar el Puente 516 y la cascada de las Aguieiras. En este control tendremos que enseñar nuestras entradas.

Tanto si accedemos al 516 Auroca, cómo si no, el siguiente destino, es la garganta do Paiva. Comenzamos con un pequeño tramo de pista, que enseguida nos deja en el inicio de las pasarelas. En este tramo hay que tener precaución, debido a que, aunque el camino es amplio y son apenas 500 metros hasta el cauce del río, las paredes son verticales, y las escalinatas sujetas al mismo tienen que descender 180 metros de forma vertiginosa. En este punto es desde donde tendremos las mejores vistas de la cascada das Aguieiras. Un salto de agua de unos 160 metros de altura, procedente del arroyo Aguieiras, que se deslizan verticalmente por una pared de granito.

Se ha habilitado un mirador para observar, tanto la cascada, como la serpenteante escalera que tenemos que descender hasta alcanzar la orilla del río Paiva.

Durante el recorrido podremos observar carteles didácticos con código QR, desde donde podremos descargar información de los puntos más interesantes de esta ruta. Además hay instalados cada dos kilómetros unos teléfonos de emergencia, que esta muy bien en caso de que ocurra cualquier incidente. Como curiosidad, y si tenemos suerte, podremos compartir el recorrido con las cabras que habitan el lugar. Nosotros compartimos el sendero con ellas.

Llegados a la zona más baja, junto a la orilla del río, las pasarelas comienzan a llanear con suaves subidas y bajadas. A la altura del kilómetro 4 de la excursión, veremos un puente colgante, que ha sustituido a una antigua barca que unía los términos de Canelas y Alvarenga. No tendremos que atravesarla, ya que forma parte del GR que lleva a Alvarenga. Continuaremos hasta llegar a la playa fluvial de Bao, sitio idóneo para reponer fuerzas y tomar el bocadillo. Si es verano, y el tiempo lo permite darse un refrescante chapuzón en la aguas frías y cristalinas de este río.

Tras el descanso, seguimos nuestro camino dirección a Espiunca, pasando por lugares muy bucólicos y llenos de encanto, hasta que nos desviamos unos metros para divisar la zona de Gola do Salto, donde más se acentúa el desnivel del río y donde se practican deportes de aventura como rafting o descenso de cañones.

Un poco más adelante, es posible abandonar los pasadizos de Paiva, por la zona de control del tramo Vau-Espiunca.Es también, donde las empresas de turismo activo dan por finalizado el descenso en raftin. Pero, eso sí, aquí no hay taxi, se tendría que llamar para solicitar el servicio.

Contiuamos nuestra excursión por las pasarelas de madera que en algunas ocasiones quedan suspendidas en el aire y nos acercan, más si cabe, al curso del río Paiva. Por el camino iremos observando los meandros del río, pequeñas cascadas, hermosas formaciones rocosas, más carteles informativos y muchos más atractivos visuales, hasta llegar a Espiunca.

En el tramo final de la ruta, alcanzamos el Puente de Espiunca, y desde la propia pasalera, si nos fijamos, en la orilla derecha del río, está la Falha da Espiunca. Esta hendidura es un punto de interés, señalada como geositio, donde se puede observar los distintos elementos que forman la falla geológica.

Un poco más arriba del puente de Espiunca, tendremos estacionado nuestro vehículo, y donde se encuentra la playa fluvial y un bar restaurante donde podremos tomarnos algo tras la excursión o comer los estupendos platos que aquí se preparan, dando por concluida la ruta de los Passadicos do Paiva.